
Según los postulados de la ontología del lenguaje, las palabras positivas tienen el poder de transformar el mundo.
Sabido es, y lo vemos a diario, que las cosas ni los hechos son la palabra. Pero sucede que la palabra es, al menos en nuestro mundo imperfecto, el único vehículo de interpretación.
De allí que desde la ontología del lenguaje se postula que "la palabra abre o cierra mundos" y también, "abre o cierra posibilidades".
Entonces decimos, que el lenguaje deviene siempre en acción. Si utilizamos un verbo positivo, este será enormemente productivo.
Por supuesto, en Latinoamérica estamos contaminados con miles de "charlatanes" "habladores" o "chantas".
El Poder del Lenguaje Positivo
Fuente: Reporteindigo
La mejor palabra que puedes decir en una junta de trabajo para tener éxito es “sí”, o al menos eso indican los resultados de un estudio realizado por la Sloan School of Management del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés).
También las palabras “dar”, “comenzar” y “junta” tienen un poder persuasivo sobre los colegas, añade la investigación.
Contrario a la palabra “discurso”, por ejemplo, que no tuvo un efecto significativo, de acuerdo a las estadísticas del análisis a 95 juntas.
Al igual que el término “reconocimiento”, que contrario a lo que se podría creer, no tuvo el mismo alcance que el resto de palabras que destacaron en las estadísticas que se observaron.

Y no solo eso, este tipo de palabras positivas hizo que los participantes del estudio se sintieran interesados y productivos.
La palabra “dar” se interpreta como un “beneficio para un grupo (dentro de la empresa)”.
Esta palabra también “puede sugerir que una idea se basa en el conocimiento previo”, agrega Rudin.
El Poder de Afirmar
Fuente: Patricia Ulrich
Las declaraciones de afirmación o negación pueden cambiar nuestros acontecimientos y relaciones. Entonces decir "si" o "no" alteran el flujo de nuestra cotidianeidad.
En el lenguaje de las decisiones y el compromiso, decir "si" implica aceptación y también una manera de expresar nuestro ser.
Las afirmaciones nos remiten a las promesas, al futuro que vendrá. Y de allí que nuestra conducta debe ser coherente con ella.
Desde la ontología del lenguaje, se sostiene que un "si" abre posibilidades y un "no", las cierra.
El automatismo del "si", muy difundido en algunos ámbitos, implica sumisión. El automatismo del "no", implica un comportamiento obstruccionista, semejante al que expresan las figuras arquetípicas de nuestros conocidos burócratas.
Bien aconsejan los coach a los emprendedores que ante la negativa debemos tener la capacidad de afirmarnos:
Frente a un "no" a una propuesta creativa o negocio, es preciso oponer un "si" interior, personal, que nos remite a nosotros mismos, y a las ganas de crecer.
Entradas Similares
EL ARTE DE SABER NEGOCIAR
PETER DRUCKER, MANAGEMENT DE UNO MISMO
EL SALARIO EMOCIONAL, NUEVAS TENDENCIAS EN RECURSOS HUMANOS
CLAVES PARA MOTIVAR (Y NO) DESMOTIVAR
LENGUAJE CORPORAL, CLAVES PARA INTERPRETAR A NUESTROS AMIGOS
Referencias
(1) http://www.reporteindigo.com/piensa/innovacion/siempre-un-si
(2) http://patriciauhrich.com/el-poder-del-si-para-alcanzar-tus-metas-y-suenos/
(3) http://books.google.com.ar/books?id=3fhCeuHJl3UC&printsec=frontcover&dq=ontologia+del+lenguaje&hl=es&sa=X&ei=VcG0UprqN-zesATC0oLwCg&ved=0CC8Q6AEwAA#v=onepage&q=ontologia%20del%20lenguaje&f=false