TRANSLATE

Cómo ser Feliz en el Trabajo, 5 Claves según Great Place to Work

Extracto y resumen: Great Place to Work

Las nuevas generaciones llegaron al mercado laboral e imponen su paradigma. Tecnología, integración con la vida privada, mucho movimiento y nada de rutina. La oficina ya no es lo que era. Para responder cómo ser feliz en el trabajo, primero hay que saber qué es lo que te motiva a elegir, o no, el trabajo que tenés y no otro. 
Si nos ajustamos a las encuestas y opinión de los especialistas en management y recursos humanos, esos motivos son tres, y en este orden: crecimiento y desarrollo profesional, equilibrio entre vida profesional y trabajo, y sueldo. 
Sorpresa: la gente no trabaja tanto por dinero como por motivaciones intangibles. 


Según una investigación realizada en el país por la consultora de clima laboral Great Place to Work, en la Argentina el principal motivo por el cual una persona elige permanecer en su empresa es la posibilidad de crecimiento y el desarrollo profesional. El 43% de los entrevistados manifestaron que ese es el principal motivo por el que permanecen en las empresas, aun por encima de la remuneración y los beneficios, que se encuentra en tercer lugar, con el 19% de preferencias. Por su parte, y siguiendo la tendencia creciente que se viene observando desde hace algunos años en todo el mundo, el equilibrio entre la vida profesional y personal se ubica en segundo lugar con un 24% de respuestas. Otros motivos y la estabilidad laboral se encuentran en cuarto y quinto lugar, con un 9% y un 4% respectivamente. 
¿Cómo Podemos ser Felices en el Trabajo?
 Parte de la respuesta la tiene una generación que los sociólogos llaman Generación Y. Son aquellos jóvenes nacidos entre 1981 y 1993 que, en todo el mundo, son 80 millones de personas y representan, por ingresos y estilo de vida, uno de los grupos económicos más importantes. 

La Generación Y está forzando la manera en que las personas se relacionan con su trabajo.Andrés Hatum, profesor del IAE Business School, director del Centro de Investigación Grupo RHUO y autor del libro Yrrupción. Los cambios generacionales y el futuro de la organización, los define en cuatro dimensiones: tienen una gran capacidad multitasking pero poca capacidad de concentración, son nativos digitales y quieren usar su propia tecnología en las empresas, tienen conciencia social y les gusta el trabajo con impacto en el bien común, y, por último, buscan la integración de su vida personal con la profesional. "La Generación Y revienta cualquier organización", dice Hatum

La Desorientación de la Generación Y
La inglesa Lynda Gratton, consultora y especialista en management, considerada una de las mujeres más influyentes de Gran Bretaña, advierte sobre esa confusión en la que entran los jóvenes Y antes de empezar a trabajar. "La tragedia para esta generación es que cuando una persona no trabaja en los primeros tres o cuatro años de su carrera, esta se ve perjudicada seriamente durante décadas. Los hábitos, de entrar a trabajar y concentrarse, tardan algún tiempo en desarrollarse. Estas personas jóvenes, muy preparadas académicamente, que sufren por conseguir un trabajo pierden las competencias necesarias para insertarse en el mundo laboral", dice. 


Para Hatum, el problema de esta generación es que están sobrevalorados."Sus padres los sobreprotegieron. Por eso los chicos de la Generación Y se creen que son mucho más de lo que son".  

Clave 1: Desarrollo Personal y Contención
Como dice la encuesta de Great Place to Work, una consultora de Recursos Humanos, el primero factor que balancean los jóvenes en un nuevo trabajo es la posibilidad de desarrollo personal."Quieren garantías de que podrán aprender, adquirir nuevas habilidades y crecer", dice Omar Gennari, CEO de Greate Place to Work. Esto no significa que quieran crecer en el organigrama de la compañía: de hecho, no les interesa. "La generación Y no soporta la rutina, y rota rápido",dice Hatum. La permanencia en los puestos de trabajo a nivel global pasó de cinco a dos años con el cambio generacional.

No es casualidad que este aspecto, la necesidad de un desarrollo profesional, esté primero en las prioridades para ser feliz en el trabajo. Los jóvenes que tienen entre 18 y 29 años forman parte de la Generación Y, y viven en general más con sus padres que con parejas, o solos, un factor que los aleja de preocupaciones importantes, pero que también retrasa su maduración."Al mismo tiempo que tienen sus exigencias, tampoco saben bien qué quieren hacer. Su plan de vida es disperso, en parte porque tienen una incentivación permanente a hacer cosas nuevas. Tienen muy idealizado el lugar de trabajo, y cuando se reciben no saben qué hacer", dice Hatum, que cuenta un ejemplo de cómo las empresas asumen un rol contenedor frente a esa incertidumbre

Clave 2: Lograr un Equilibrio entre la Vida Personal y Laboral
Una máxima muy común entre las generaciones más viejas que sufren el mercado laboral es la posibilidad de equilibrar la vida personal con la profesional. Esas generaciones se criaron viendo a sus padres entregados al trabajo, y buscan, con poco éxito, equilibrar la vida profesional con la personal. Así se los ve resistiendo los mails antes de dormir o terminando una presentación el sábado a la mañana. 


En esto también hay mucho que aprender de la Generación Y, que no busca equilibrar el trabajo y la vida, sino directamente integrarlas.  

"Esta demanda apareció en el segundo puesto de las exigencias de las personas al momento de buscar trabajo hace cinco o siete años. Antes directamente no figuraba", cuenta Gennari, de Great Place to Work.

"Aún hoy, varios años después, las empresas siguen creyendo que los jóvenes no quieren trabajar tantas horas, cuando, en realidad, lo que están pidiendo es que el trabajo sea más eficiente", dice Omar


"Apuntan a integrar el trabajo y la vida, no solo a equilibrarlos, lo que podría no ser suficiente para ellos. Sus diversas actividades, entre las cuales el trabajo es una, requieren incluir el trabajo y el lugar de trabajo en los aspectos no laborales de su vida". Uno de los modos en que la integración vida-trabajo se evidencia claramente es la exigencia por parte de los jóvenes de que las empresas les permitan usar su propia tecnología. 

Los Y usan la tecnología para mantenerse al día y expandir sus vínculos. Según un estudio de Accenture que Hatum cita en Yrrupción, el 86% de los Y usa internet, y el 56% envía y recibe mensajes todos los días por diferentes aplicaciones. Para el 52% de esta generación, el equipo y la tecnología de vanguardia en el lugar de trabajo son consideraciones fundamentales a la hora de elegir un empleador", dice el autor. 


Clave 3: Sentirse parte de un Trabajo
La Generación Y resuelve la felicidad en el trabajo corriéndolo como eje central de su vida. Para ellos los amigos, las redes sociales, el tiempo libre, compartir experiencias, viajar son tanto o más importantes que trabajar. Esto hace que tengan menos miedo a perder un puesto, pero también menos compromiso. Los Y son felices cuando, en lugar de sentirse parte de un trabajo, se sienten parte de un proyecto. La respuesta a los porqué y para qué, siempre que la reciban, los libera y los enfoca en un trabajo que de otra manera no valorarían tanto. 

Clave 4: Salario Emocional
Recién en el tercer puesto aparece el salario como factor para decidir entrar o permanecer en un trabajo. Este punto, el dinero, apareció en esta posición hace cinco o seis años, con el regreso de la inflación. Antes estaba aún más abajo en las prioridades, en el quinto o sexto lugar.

¿importa el dinero? "Sí importa, pero primero el desafío tiene que ser relevante. Cuando los empleados no tienen desafíos, piden plata",dice Andrés.  

 "Hay un hartazgo de la vida corporativa. Ya no existe el sueño de entrar en una empresa y hacer carrera", explica Hatum. Para Gennari, muchas veces la cuestión de la remuneración es un problema de percepción y de comunicación. 

Clave 5: Comunicación
Según una investigación hecha por Great Place to Work entre 50.000 personas de la Argentina, cuantas más reuniones de feedback entre jefes y empleados, mejor es la percepción que el empleado tiene sobre su ambiente de trabajo.

Este informe dice que la brecha en la percepción del clima entre los que tienen más de dos reuniones anuales y los que no tienen ninguna llega en algunos casos al 40%, e incide incluso en la percepción del propio ingreso y el merecimiento de los ascensos. 

"Esta investigación demostraría que a más instancias de reunión, mayor es el vínculo de confianza entre jefe y empleado, lo que conlleva un aumento en la percepción que el colaborador tiene del ambiente laboral", dice el trabajo. 


ENTRADAS SIMILARES


 Neurociencias: La Felicidad es una Habilidad

 El Salario Emocional, Nuevas Tendencias en Recursos Humanos

 El Clima Laboral como Factor de Diferenciación Competitiva


Tecnología del Futuro: Por Primera Vez una Computadora Piensa por Sí Misma

Eugene tiene 13 años, pero nunca ha crecido. Sueña con visitar otros países, pero no puede viajar. Le gusta el rapero Eminem, pero jamás ha escuchado sus letras… No, todo esto no se debe a alguna extraña enfermedad congénita. Eugene, simplemente, no es humano. Es un programa de computadora, un bot conversacional, un fragmento de software construido a partir de datos y reglas lógicas. Concebido en 2001 por Vladimir Veselov, Sergey Ulasen y Eugene Demchenko –a quien probablemente le debe su nombre–, el joven ucraniano tiene ahora más cosas en las que enfocar su atención, pues en tan sólo seis días se ha elevado al estrellato.

NOTICIA: EL PRIMER COMPUTADOR QUE PIENSA POR SI MISMO
Fuente: Tu History

Por primera vez en la historia, una supercomputadora logró superar el test de Turing, especialmente diseñado para determinar si una máquina tiene capacidad de pensamiento propio.
La prueba tuvo lugar este último domingo, cuando Eugene Goostman, tal el nombre de un software desarrollado para responder como si se tratara de un humano adolescente de 13 años, fue sometido a un interrogatorio improvisado en la Royal Society de Londres. Tanto las preguntas, como las respuestas, fueron realizadas a través de mensajes escritos en pantalla y un tercio de los humanos que interrogaron a la máquina no pudo detectar que se trataba de un interlocutor cibernético.
El evento estableció un verdadero hito en el avance sobre el campo de la inteligencia artificial y tuvo lugar precisamente en el 60 aniversario del fallecimiento de Alan Turing, matemático británico que logró sentar las bases para la informática moderna. A propósito de la célebre prueba que lleva su nombre, el científico señaló alguna vez que si una computadora fuese capaz de engañar a un tercio de sus interlocutores, haciéndoles creer que es en realidad un humano, entonces esta computadora estaría pensando por sí misma.
El software Eugene Goostman es creación de los ingenieros informáticos Vladimir Veselov y Eugene Demchenko.
¿QUIÉN ERA ALAN TURING?
Fuente: Wikipedia
Alan Turing es considerado fue un matemático, científico y teórico de la computación nacido en Londres el 23 de Junio de 1912. 
Considerado uno de los padres de la computación fue el precursor de la informática moderna.


Durante la Segunda Guerra Mundial, trabajó en descifrar los códigos nazis, particularmente los de la máquina Enigma; durante un tiempo fue el director de la sección Naval Enigma del Bletchley Park. Tras la guerra diseñó uno de los primeros computadores electrónicos programables digitales en el Laboratorio Nacional de Física del Reino Unido y poco tiempo después construyó otra de las primeras máquinas en la Universidad de Mánchester.
Entre otras muchas cosas, también contribuyó de forma particular e incluso provocativa al enigma de si las máquinas pueden pensar, es decir, a la inteligencia artificial.


EL TEST DE TURING
Fuente: Wikipedia

El test de Turing (o prueba de Turing) es una prueba propuesta por Alan Turing para demostrar la existencia de inteligencia en una máquina. Fue expuesto en 1950 en un artículo (Computing machinery and intelligence) para la revista Mind, y sigue siendo uno de los mejores métodos para los defensores de la inteligencia artificial. Se fundamenta en la hipótesis positivista de que, si una máquina se comporta en todos los aspectos como inteligente, entonces debe ser inteligente.


La prueba consiste en un desafío. Se supone un juez situado en una habitación, una máquina y un ser humano en otra. El juez debe descubrir cuál es el ser humano y cuál es la máquina, estándoles a los dos permitido mentir al contestar por escrito las preguntas que el juez les hiciera. La tesis de Turing es que si ambos jugadores eran suficientemente hábiles, el juez no podría distinguir quién era el ser humano y quién la máquina.
En 1990 se inició un concurso, el Premio Loebner, una competición de carácter anual entre programas de ordenador que sigue el estándar establecido en la prueba de Turing. Un juez humano se enfrenta a dos pantallas de ordenador, una de ellas que se encuentra bajo el control de un ordenador y la otra bajo el control de un humano. El juez plantea preguntas a las dos pantallas y recibe respuestas. El premio está dotado con 100.000 dólares estadounidenses para el programa que pase el test, y un premio de consolación para el mejor programa mensual.
La primera vez que un juez confundió a una máquina con un humano fue en el año 2010, cuando el robot Suzette, de Bruce Wilcox, superó la prueba.

ENTRADAS SIMILARES

 Nuevos Hallazgos de Inteligencia Artificial para aplicar en Smartphones


 Neuromanagement: Cerebros y Mentes Digitales


 Tecnología del Futuro: Inteligencia Artificial y Sentidos Potenciados


 Novedades Gadget, EmoSPARK la Consola Inteligente que Reconoce Emociones

Referencias
(1) http://noticias.tuhistory.com/inteligencia-artificial-por-primera-vez-en-la-historia-una-computadora-logro-pensar-por-si-misma
(2) http://www.clarin.com/sociedad/Inteligencia-artificial-computadora-logro-pensar_0_1154284889.html
(3) http://historiascienciacionales.tumblr.com/post/88631590921/el-miedo-de-turing-alan-turing-brillante

Invenciones del Futuro: Aero X, La Motocicleta Voladora


Inspirada en Star Wars, el funcionamiento es parecido al de un hovercraft, en este caso con un motor de tres rotores refrigerado por aire y combustión térmica que permite una velocidad máxima en el aire de 70 km/h. Este biplaza volador se eleva hasta 3,7 metros sobre el suelo para vadear la mayoría de obstáculos terrestres, prometiendo un manejo muy intuitivo gracias a su posición de moto. La carrocería está realizada en fibra de carbono, lo que permite dejar el peso en seco en 356 kilos.  Eso sí, es una ‘moto’ (más bien un trike invertido) que mide lo mismo que un coche, 4,5 metros de largo.
La autonomía se cifra en 75 minutos de vuelo y no solo se plantea para un uso lúdico, también para labores de rescate, de agricultura u otras aplicaciones prácticas. Entre las medidas de seguridad están su despegue vertical, la barra antivuelco que equipa o los airbags opcionales, mientras que en el del confort presenta toma de 12 V o conexión USB para conectar diversos dispositivos.
La Aero-X puede llevar máximo 140 kg, lo que es aproximadamente dos pasajeros. Con una sola carga de gasolina se puede obtener hasta una hora con quince minutos de uso, por lo que este vehículo parece estar ideado para desplazarse en distancias muy  cortas.


Más allá del precio y su fecha de lanzamiento, nos encontramos con una moto que es capaz de circular a una velocidad máxima de 72 kilómetros por hora y flotar hasta una altura de 3,7 metros. Su capacidad es de dos personas y su diseño futurista nos recuerda a cómo hemos imaginado a través de la ciencia ficción este tipo de vehículos.
Diseñar la conducción del Aero X no ha sido fácil ya que uno de los problemas del sistema que lleva esta moto es el rotor y su inclinación hacia un lado cuando queremos ir hacia adelante. En los helicópteros, por ejemplo, es algo frecuente y los pilotos están siempre atentos a este efecto.

PROTOTIPO DEL FUTURO

Sus creadores afirman que el diseño final de esta moto será lo suficientemente sencillo e intuitivo para que cualquiera pueda usarlo sin grandes dificultades. Si todo va bien, dentro de un par de años se realizarán las primeras pruebas con la versión final del vehículo.
Como curiosidad decir que antes de que existiera Aero X ya había proyectos desarrollados en los 60 para conseguir algo parecido a un vehículo volador capaz de flotar unos cuantos metros. El proyecto fue abandonado porque no supieron crear un sistema de control lo suficientemente estable como para usarlo.


Según nos cuentan desde IEEE que este vehículo ya tiene una interesante fase de prototipos, y que será en el año 2017 cuando se empiecen a vender las primeras unidades por un jugoso precio de 80 000 dólares, que en realidad notamos razonable conociendo que estamos ante la primera tecnología en su tipo.

ENTRADAS SIMILARES







REFERENCIAS
(1) http://www.unocero.com/2014/05/15/la-moto-voladora-llega-en-2017/?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+matuk+%28unocero.com%29
(2) http://www.xataka.com/robotica/aero-x-nos-promete-una-moto-flotante-para-el-2017
(3) http://www.xatakaciencia.com/tecnologia/aero-x-la-primer-moto-voladora-ya-tiene-precio-y-fecha-de-estreno
(4) http://www.masmoto.net/novedades/aero-x-moto-voladora-2017/

Los Predictores del Talento Humano

¿Qué es el talento? ¿Como se define? ¿Cuál es su significado? ¿Cómo se gestiona? ¿Cómo puede desarrollarse? ¿Cómo se evalúa y mide su impacto?  ¿Qué relevancia adquiere en el logro de ventajas competitivas sostenibles? 

La escasez de talentos es una percepción compartida por los especialistas en la materia, quienes dan como ejemplo que en los Estados Unidos se prevé que el 60 por ciento de las nuevas demandas laborales requerirá capacidades que solo podrán ser cubiertos por el 20 por ciento de la población mundial (Jericó, 2008).
Consultoras como McKinsey pronostican un futuro acrecentamiento en la demanda de talentos a la vez que su presencia disminuida, panorama este que se en la actualidad se da en llamar como el futuro escenario de la guerra por el talento caracterizada por:
  • Las tendencias globales económicas y demográficas.
  • El incremento en la movilidad de personas y organizaciones.
  • Transformaciones en el ambiente de negocios, en la cultura y en las demandas de  competencias.
  • Un mayor despliegue en la diversidad de la mano de obra.
  • El avance de las tecnologías de información y comunicación (TICs) ha cambiado la composición del trabajo, favorecido su internacionalización, su diversidad y movilidad.
Definición del Talento
La gestión de talentos ha cobrado una creciente relevancia en la concepción estratégica de la gestión de recursos humanos, fundado en la oportunidad de crear una fuente real de ventajas competitivas sostenibles (Leonard Barton, 1992). 

El vocablo talento encuentra como significados a un fenómeno caracterizado por ser plurifacético y plurideterminado sinónimos como el genio, la superdotación, el rendimiento excepcional, el prodigio, etc. Las distinciones más usuales suelen darse entre la superdotación y el talento. Según los especialistas, la superdotación es una clase de talento general, manifiesto en habilidades o rendimientos excepcionales producidos en un amplio abanico de disciplinas  o áreas, ya sea intelectual, estética, emocional, física, etc. Los diversos enfoques que han dado en estudiarlo atienden en forma parcelada el cociente intelectual, o los rasgos de personalidad, la dimensión creativa o la socio – afectiva. De este modo, el talento en si se define como la excepcionalidad en una sola de estas áreas. Un ejemplo de ello puede ser la caracterización del talento creativo hecha por Renzulli (1992): 

  • Se manifiesta en logros que toman años o meses para alcanzarlos.
  • Requieren altos niveles de autoconcepto y de compromiso con la tarea.
  • Se puede medir por las contribuciones que haga un sujeto a un área del conocimiento.
  • La naturaleza de la contribución está en el descubrimiento.
  • Su desarrollo requiere creatividad.
  • La edad típica es la adultez.
  • Está orientado a la solución de problemas reales.

Autores como Rubinstein (1973) distinguen entre talento y genio, siendo el primero un desempeño excepcional en el marco de un contexto cultural determinado, mientras que el genio plantea una fuerte ruptura en los consensos colectivos, y es capaz de crear una nueva visión. De aquí se cita que:

“Se considera un genio a una persona que hace un aporte creativo de gran envergadura sobre un área del conocimiento y que alcanza un reconocimiento de la comunidad científica. Por ello, el genio depende, en gran medida, de las circunstancias a nivel sociocultural, además de los otros factores que constituyen el talento." (Lorenzo García, 2002, página 2)

La curiosidad, el trabajo y la constancia son los rasgos que diferencian a los genios del resto de los individuos.” (Lorenzo García, op. cit.)


Los estudios de la inteligencia humana han realizado un gran aporte a la noción del talento, pues sobre sus aportes fue posible construir modelos cada vez más abarcativos y sistémicos de la cognición. Huteau (1990) señala tres corrientes principales en el estudio de la inteligencia: 
  • La corriente estructuralista, cuyo objetivo es el estudio de las aptitudes intelectuales.
  • El enfoque funcionalista, centrado en las actividades procesadoras de información.
  • La genética del desarrollo, basada en la perspectiva constructivista de Piaget. Sus áreas de estudio incluyen: 1) la naturaleza biológica del la inteligencia; 2) la perspectiva constructiva donde el individuo es el protagonista de la inteligencia; 3) el desarrollo de la inteligencia, como producto de la interacción del individuo con su medio ambiente físico y social. 
Desde aquí, el enfoque genético enfatiza el papel de la herencia en la inteligencia, pero asociada a las condiciones ambientales que obran de activadores y le permiten desarrollarse. Acuden a su encuentro los enfoques biológicos que estudian los procesos complejos neurofisiológicos y psicofisiológicos. Algunas de las áreas de preocupación de sus estudios se han orientado hacia:
  • La medición de la velocidad de respuesta ante determinados estímulos.
  • La complejidad de las respuestas frente a los estímulos presentados.
  • Resultado de esta clase de estudios, se concluye que los índices de capacidad media muestran deficiencias en su poder de dar una rápida respuesta con cierto grado de eficiencia y complejidad. Por el contrario, la capacidad intelectual superior se destaca por elevadas performances tiempo – complejidad.


El Modelo Triárquico del Talento
En Renzulli (1978) hallamos una definición del talento como un todo integrado entre capacidades intelectuales, creatividad y motivación. El talento emerge como excepcionalidad intelectual producto de la combinación de procesos lógico – convergentes y creativos divergentes, en el procesamiento de la información.
Esta definición destaca la integración de los aspectos cognitivos y afectivos de la persona, puestos de manifiesto en la flexibilidad, originalidad o la autonomía de sus acciones, y en la perseverancia necesaria para el logro de sus metas. La noción de este modelo triárquico se completa de las siguientes conceptualizaciones:
  • Inteligencia por encima de la media, consistente en la capacidad de procesar información y de emplear la inteligencia de manera específica en situaciones de trabajo real.
  • Compromiso con la tarea, como aspecto de motivación que implica perseverancia, concentración, resistencia a la fatiga y tiempo de dedicación.
  • Creatividad, como capacidad que confiere originalidad, ingenio, dejar de lado las convenciones,  u otorgar de flexibilidad la ejecución de tareas.


La concepción compleja de la inteligencia resumida por Doménech Auqué (2004), encuentra nuevas categorizaciones, cuyo basamento está dado en la implementación práctica en un ambiente social concreto. Esto es, a decir de Stemberg (1994) la inteligencia debe ser plasmada en un orden social, adquirir relevancia en su ejecución, lograr reconocimiento en sus aportaciones.  Las tipificaciones también plantean la novedad de incorporar la noción de inteligencia emocional como un componente esencial de la interacción social de naturaleza no cognitiva. La enunciación de la concepción compleja entonces incorpora:
  • Inteligencia social, que distingue cinco factores: 1) actitud prosocial; 2) destrezas sociales; 3) destrezas empáticas; 4) emocionalidad; 5) ansiedad social.
  • Inteligencia exitosa o inteligencia adaptativa basada en la teoría triárquica de Stemberg (1994). Las habilidades requeridas son analíticas (descomposición, evaluación de alternativas); creativas (aptas para hallar soluciones); prácticas (trabajo sobre el mundo real).
  • La inteligencia práctica se entiende como la capacidad de adaptación en un ámbito concreto. A partir de algunos estudios en el ámbito del ajedrez (Chase y Simon, 1973) y otros estudios se aglutinaron categorías de inteligencia y hallaron tres habilidades en común, tales son, la inteligencia verbal, la inteligencia práctica y la resolución de problemas. A diferencia de otras clases de cognición, en la inteligencia práctica predomina el conocimiento tácito.
  • Inteligencia emocional (IE). Los modelos de inteligencia emocional mezclan la cognición (entendimiento de la emoción), la percepción sensible, el reconocimiento interior y la empatía emocional. En el ámbito de trabajo, la IE, trabaja sobre el reconocimiento de las conductas, las motivaciones y su canalización en la concreción de una tarea concreta. La inteligencia emocional es comprende la percepción emocional, la expresión emocional, la conexión entre emoción y pensamiento, la capacidad de regular las emociones propias y las de los demás. En definitiva la inteligencia emocional permite: 1) percibir las emociones propias y las de los demás; 2) responder de manera efectiva y emocional a las situaciones diarias; 3) Hallar satisfacción a través de las recompensas emocionales. El trabajo, y su eficacia en el mismo, pueden ser fuente de satisfacción emocional. 4) Equilibrar las áreas laboral, personal y recreativa.

A partir de esta conceptualización, Stemberg distingue tres clases de talentos:
  • Analíticos, quienes demuestran altos rendimientos en actividades de planificación.
  • Creativos, con alta capacidad para crear nuevas ideas y también de poder sintetizar información.
  • Prácticos, con mayor habilidad de adaptación al entorno.

Predictores del Talento
La medición del talento ha sido evaluada a través de diversos indicadores cualitativos y cuantitativos. Aquí caben distinguir dos grandes grupos de índices, en primer lugar, aquellos conocidos como “predictores del talento”, cuyo objetivo es su detección temprana y el desarrollo del mismo, y en segundo lugar, los indicadores de resultados, que en forma directa e indirecta intentan medir los agregados de valor organizativos del talento.

El inicio en el desarrollo de predictores e indicadores del talento corresponde a Günter Trost (1993) quien propuso un sistema de pronóstico apto para el desempeño académico y laboral. Su método se sostiene en indicadores que reflejan la productividad y excelencia en el desempeño.

De los predictores, genera mayor reconocimiento el cociente de inteligencia (CI), utilizado como único indicador o combinado con otros.

Basados en concepciones multimensionales del talento, los predoctores del talento evalúan los rasgos cognitivos y no cognitivos que tales como: 
  • Habilidades lógico formales.
  • Fluidez de ideas.
  • Sentido de la reestructuración de un problema.
  • Compromiso con la tarea.
  • Universales de orden afectivo como la alta motivación a la tarea, perseverancia o altos niveles de aspiración.

A su vez, Heller (1995) elabora un cuadro de predictores del talento, formado en base a rasgos cognitivos y no cognitivos:


Cuadro: Predictores del Talento
Rasgos cognitivos
Rasgos no cognitivos
Habilidades lógico formales.
Fluidez de ideas.
Flexibilidad.
Sentido de la reestructuración del problema.
Sentido de la originalidad de las soluciones.
Sentido de la originalidad del producto.
Velocidad en el procesamiento de información.
Capacidad para reducir la complejidad de un problema.
Pensamiento divergente y soluciones innovadoras.
Curiosidad.
Afán de saber e instinto de investigación.
Capacidad de exploración.
Deseo de formular preguntas intelectuales.
Motivación intrínseca por el logro.
Compromiso con la tarea.
Tolerancia a la ambigüedad.
Persistencia.
Inconformidad.
Mayor predisposición de orientación a las metas.



Bibliografía
  • Leonard-Barton, Dorothy, “Core capabilities and core rigidities: A paradox in managing new product development”, Strategic Management Journal, Vol. 13, no. 5, julio 1992, pp. 111-115.
  • Renzulli, J. “A General Theroy for the Developtment of Creative Productivity in young people”. En F. Mönks y W. Peters (Eds) Talent for the future. Holland, Van Gorcum, 1992.
  • Rubinstein (1973): Principios de psicología general. LaHabana, Instituto Cubano del Libro.
  • Lorenzo Garcia, R. “Polémica en torno al desarrollo del talento”, Revista Cubana de Psicología, Vol 19. N°1, 2002.
  • Renzulli, J. “A General Theroy for the Developtment of Creative Productivity in young people”. En F. Mönks y W. Peters (Eds) Talent for the future. Holland, Van Gorcum, 1978.
  • Stemberg, R. “Inteligencia Exitosa”, Paidós, Buenos Aires, 2001.
  • Stemberg, R. “La Sabiduría. Su naturaleza, orígenes y desarrollo” Bilbao, 1994.
  • Sternberg, R, “The Evolution of Theories of Intelligence” Intelligence, 5, 209-230, 1981.
  • Sternberg, R. “Intelligence and nonentrenchment” Journal of Educational Psychology, 73, 1-16, 1981.
  • Sternberg, R., “Más Allá del Cociente Intelectual” Bilbao, Desclée de Brouwer, 1990.
  • Heller, K. “Capacidad y Creatividad: Su papel en la Ciencia y la Tecnología”, Ideación, Nº 5, Valladolid, 1995.


ENTRADAS SIMILARES