Fuentes y extracto: Harvard Business Review, Kairos, Aprendemindfulness
La atención, en
todas sus variedades, constituye un valor mental que pese a ser poco
reconocido, influye muy poderosamente en nuestro modo de movernos por la vida.
Es un activo mental poco explorado y una capacidad mental subestimada y
escurridiza, indispensable para determinar el escenario de nuestras operaciones
mentales y vivir una vida plena.
En el
libro “Focus” Daniel Goleman destaca el importante rol que juega la
atención como base para el desarrollo personal y profesional. Las
circunstancias que rodean el nuevo contexto en el que vivimos, con un bombardeo
constante de estímulos e informaciones, junto con la nueva y profusa
investigación neurocientífica sobre las funciones y capacidades del cerebro se
orientan a regular y fortalecer nuestros recursos atencionales como un aspecto
de gran relevancia para el desarrollo de capacidades cognitivas y emocionales.
Daniel Goleman muestra las negativas consecuencias que en los diferentes
ámbitos de la vida puede tener una atención debilitada, así como las posibilidades,
confirmadas por la ciencia, de entrenar y fortalecer estas capacidades de
atención a través el entrenamiento.
Goleman
plantea tres formas de atención que resultan hoy imprescindibles para
desarrollar la excelecia, ya sea en los estudios, las artes, los negocios y el
deporte.
Para ello recomienda una "tríada de atenciones"
En primer
lugar, la
atención en uno mismo. Es imprescindible ser plenamente
conscientes de nuestro mundo psíquico, emocional e intelectual.
En segundo
lugar, la
atención en los demás. La empatía por el otro y la acción
empática hacia los demás resulta esencial.
Finalmente,
hay que saber poner la atención también en el entorno, en los sistemas
complejos que nos rodean, ya sea el medio ambiente, la empresa en la que
trabajamos o la sociedad en la que vivimos.
En el cultivo
de estos tres
focos reside una de las claves de la eficiencia y el bienestar.
El Líder Enfocado
Fuente: Harvard
Business Review
Una tarea principal del liderazgo es dirigir la atención. Es preciso que los
líderes puedan aprender a enfocar su propia atención.
Cuando nos referimos a la concentración, comúnmente entendemos que se
trata de una tarea basada en filtrar las distracciones. Pero una gran cantidad
de investigaciones recientes en neurociencias demuestran que nos centramos en
muchas formas, para diferentes propósitos, a partir de diferentes vías
neuronales, algunos de los cuales trabajan en conjunto, mientras que otros
tienden a permanecer en oposición.
Todo líder necesita cultivar la "tríada de la
conciencia", esto es, centrarse en sí mismo, en sus semejantes y en su
entorno.
Esta capacidad provee de la abundancia y el
equilibrio adecuado, porque la incapacidad de orientarse hacia el interior te
deja a la deriva, la incapacidad de orientarse a los demás hace que usted no
sepa qué ocurre, y la incapacidad de orientarse hacia el exterior puede hacer
que lo ciegue.
La inteligencia emocional comienza con la auto-conciencia,
esto es, el ponerse en contacto con su voz interior. Los líderes que presten
atención a sus voces interiores pueden recurrir a más recursos para tomar
mejores decisiones y conectarse con su auténtico yo.
Pero, ¿qué implica eso ? Una mirada de cómo las personas se
enfocan hacia el interior puede hacer de este concepto abstracto algo más
concreto.
La conciencia de sí mismo es un escuchar la propia voz
interior, implica un ejercicio de prestar atención a las señales
fisiológicas internas. Estas señales sutiles son monitoreados por la ínsula que
está escondida detrás de los lóbulos frontales del cerebro .
Sintoniza tu latido del corazón, y verás cómo la ínsula se
activa. ¿Qué tan bien la gente puede sentir sus latidos cardíacos como una
forma estándar de medir su auto-conciencia?
Y no son solo los
líderes quienes se benefician del equilibrio entre estos tres factores. Todos
vivimos en entornos amenazadores en los que abundan las tensiones y objetivos
enfrentados tan propios de la vida moderna. Cada una de estas tres modalidades
de la atención puede ayudarnos a encontrar un equilibrio que nos ayude a ser
más felices y productivos.
Inteligencia Emocional y Meditación
Con la
publicación de Inteligencia
Emocional quedó claro que la escuela ha de ser
tanto el lugar donde se impartan buenos conocimientos como el
espacio donde los niños y niñas tomen mayor conciencia de su mundo emocional.
Es necesario
un adiestramniento en la auto-percepción de nuestras intuiciones, valores,
emociones (positivas o negativas), de nuestro mundo interior, en definitiva,
para poder cultivarnos como personas. Con Focus planteo que el cultivo de la atención
es asimismo esencial para saber controlar nuestras
distracciones y poder poner nuestra atención en lo que realmente nos importa e
interesa.
La meditación es el mejor ejercicio práctico para desarrollar
la atención. Y ésta es como un músculo. Aunque algunos
puedan tener una mejor predisposición, la atención necesita ejercitarse; de lo
contarrio, se atrofia. Por tanto, la meditación puede ser una
herramienta inestimable para lograr la excelencia en las relaciones personales,
en nuestra profesión, en nuestro conocimiento del medio. En lo
más profundo, la meditación es una gema para transformar la mente.
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REFERENCIAS
(1) http://www.elcultural.es/noticias/LETRAS/5543/Daniel_Goleman-_La_atencion_es_un_musculo_y_como_tal_puede_ejercitarse_y_desarrollarse
(2) http://www.aprendemindfulness.com/mindfulness-daniel-goleman-la-atencion-es-un-musculo-y-como-tal-puede-ejercitarse-y-desarrollarse/
(3) http://hbr.org/2013/12/the-focused-leader/ar/1
