MyE / Management y Estrategia, Pensando el Futuro : Psicología Positiva para la Felicidad y Consciencia

Psicología Positiva para la Felicidad y Consciencia

¿Qués es la Psicología Positiva?

Es una rama de la psicología que busca comprender mediante investigaciones científicas la naturaleza de los procesos y emociones que subyacen en el pensamiento positivo de las personas.

Su objetivo es simple: comprender mejor al ser humano, aportar elementos de salud, y en especial mejorar la calidad de vida.

Sus áreas de interés aparecen como poco usuales o "muy positivas" para el normal de la psicología:

Felicidad
Creatividad
Fluir
Resiliencia
Optimismo
Humor
Inteligencia emocional
Fortaleza

Veamos una introducción al tema.

El Estado de Fluir

El psicólogo e investigador Mihály Csikszentmihályi (le diremos Miha), profesor en MIT y en la Universidad de Chicago, tiene una teoría particular sobre la felicidad: la gente es feliz cuando se encuentra en estado de fluir, esto es, es absorbida y se hace una con la situación presente o con la actividad que realiza ahora.

El estado óptimo de motivación es el estar en todo consigo mismo, sin fisuras, separación o distracciones.

De manera casual solemos fluir en algunos momentos o circunstancias, pero la idea de felicidad es más radical, pues comprende un estado de ser. Fluir y ser significarían la misma cosa.

En el fluir no existen el tiempo ni los acciones ni los pensamientos de autómata. La magia es que en ese estado, somos totalmente conscientes y creativos. Como nos dice nuestro amigo Miha, el fluir ocurre en una situación de equilibrio emocional, cuando la dificultad de la tarea y la habilidad de quien la realiza se asemejan, ni muy fácil ni muy difícil.

La teoría del fluir de Miha, se basa en estudios y encuestas que muestran la cantidad de gente que no sabe qué hacer en su tiempo libre, que se siente desamparada y perdida en un mar de oportunidades ilimitadas y termina no haciendo nada, o se apoltrona el sofá, con el mando de la tele y la cerveza en la mano. ¿Cuándo somos más felices entonces? Todavía que no siempre nos damos cuenta, es en el trabajo (la actividad adulta que más se asemeja a un juego infantil, según el sociólogo) cuando somos más felices, porque es aquí donde más oportunidad tenemos de fluir.

Ser felices con Nuestras Tareas

Fluir es un estado de atención, un delicado equilibrio que podemos ejercitar y volcar en nuestras labores cotidianas. La maravilla, es que encontrar la competencia del fluir, nos convierte en personas competentes, y ello también se expresa en todo cuanto emprendamos.

Las tareas hipercomplejas nos producen estrés, las muy simples, apatía y aburrimiento. Ninguno de estos estados nos permite fluir, según Miha.

El secreto de fluir está en ser conscientes de nuestras capacidades y habilidades y con estas herramientas, proponernos metas bien definidas y alcanzables, y que nos permitan ver sus resultados en tiempos breves: simple retroalimentación o "feedback".

Como el escalador que encara una pendiente, nuestro fluir se activa en cada paso y a medida que descubrimos que estamos más cerca de la cima.

Fluir es un Despertar

Antiguas disciplinas espirituales como el budismo o el taoismo expresaban de varias formas que la consciencia era el camino de la felicidad. Ser consciente es despertar nuestro ser profundo, nuestro espíritu, lograr un estado se ser de unicidad.

La racionalidad pura no alcanza, pues es solo una parte pequeña del ser. La emocionalidad pura tampoco. El arte de fluir es unir todos los mundos perceptuales en una sola pieza: ser, cuerpo, mente y circunstancia.

Según Miha, buena parte de nuestras vidas estamos fuera de foco, en estado de semiinconsciencia, automatizados o espiritualmente dormidos. Ocurre que un tercio de nuestra vigilia lo pasamos haciendo «actividades de mantenimiento», como vestirnos, desplazarnos o comer, actividades necesarias pero que solemos hacer sin poner en ellas atención. Otro tercio del tiempo que no pasamos durmiendo lo dedicamos a «actividades productivas», como trabajar o estudiar. Y el último tercio es para las actividades de ocio.

Intentemos fluir llevando a cabo todas estas actividades, nos gusten o no. «No sólo tienes que soportar lo que es necesario, sino que lo has de amar», manifestó Friedrich Nietzsche. Para ello, debemos empezar siendo conscientes de todo lo que hacemos, incluso de las «actividades de mantenimiento» más triviales.

Si conseguimos fluir en todos los aspectos de la vida, lograremos que no haya diferencia entre el ocio y el trabajo, de manera que podremos ser felices aunque nuestro entorno nos lleve a lo contrario.

En tanto, si seguimos creyendo que la felicidad es sólo experimentar placer, seguiremos maldiciendo la llegada del lunes.

La Experiencia Óptima

Es lo que el marinero que tensa una cuerda siente cuando el viento sopla entre sus cabellos, cuando el bote se lanza hacia las olas como un potro: las velas, el viento, el mar tararean una canción que vibra en las venas del marinero.

Es lo que el pintor siente cuando los colores en el cuadro empiezan a manifestarse y se tensan los unos con los otros, una nueva cosa, una forma viva se dibuja frente al asombrado creador.

Contrariamente a lo que piensa el común de las personas, los mejores momentos de nuestras vidas no ocurren cuando nos encontramos en estados pasivos, receptivos o de relajación (mal le pese a muchas exitosas disciplinas antiestrés), sino cuando luchamos y trabajamos duro y en forma constante para conseguir algo.

Los mejores momentos de una persona suceden cuando cuerpo y mente de una persona llegan al límite de un esfuerzo voluntario para conseguir algo difícil que vale la pena.